19 junio 2006

ASTRÓNOMOS DE LA NASA LOGRAN CAPTAR IMÁGENES DE UN METEORITO AL CHOCAR CON LA LUNA

Hay un nuevo cráter en la Luna. Mide aproximadamente 14 metros de ancho, tiene unos tres metros de profundidad y tiene una edad exacta de un mes y quince días.

Un grupo de astrónomos de NASA lo vio formarse: "El 2 de mayo del 2006, un meteorito chocó contra el Mar de las Nubes (Mare Nubium) en la Luna, liberando unos 17 mil millones de joules de energía cinética —lo cual equivale aproximadamente a 4 toneladas de dinamita", dice Bill Cooke, jefe de la Oficina de Estudios sobre Meteoritos (Meteoroid Environment Office) de la NASA, en Huntsville, Alabama. "El impacto creó una brillante bola de fuego, que grabamos en video usando un telescopio de 10 pulgadas".

Los impactos lunares son algo ya conocido —"hay material golpeando la Luna todo el tiempo", hace notar Cooke— pero hasta el momento, esta es la mejor grabación de una explosión en vivo que se ha obtenido:

El video se muestra aquí en cámara lenta, 7 veces menos rápido de lo normal; de otra manera la explosión sería casi invisible para el ojo humano. "La duración de la bola de fuego fue de apenas cuatro décimas de segundo", dice Cooke. "Un estudiante miembro de nuestro equipo, Nick Hollon de la Universidad de Villanova, detectó el destello".

Tomando en cuenta la duración del destello y su brillo (magnitud 7), Cooke logró calcular la energía del impacto y las dimensiones del cráter resultante, así como el tamaño y velocidad del meteorito. "Fue una roca espacial de apenas unos 25 centímetros (10 pulgadas) de ancho, que viajaba a unos 28 km por segundo (85.000 millas por hora)", dice.

Si una roca como esa golpeara la Tierra, nunca llegaría al suelo. "La atmósfera terrestre nos protege", explica Cooke. "Un meteorito de 25 cm se desintegraría al contacto con el aire, generando una bola de fuego espectacular en el cielo, pero no un cráter". La Luna es diferente. Al no tener atmósfera, está totalmente expuesta a los meteoritos. Aún los más pequeños pueden causar explosiones espectaculares, esparciendo residuos a mucha distancia del impacto.

De acuerdo con la Visión para la Exploración Espacial, la NASA pronto estará enviando astronautas de regreso a la Luna. ¿Podrían acaso estos meteoritos causar un problema?

"Eso es lo que estamos tratando de averiguar", dice Cooke. "Nadie sabe con certeza cuántos meteoritos golpean la Luna cada día. Monitoreando los destellos, podemos saber qué tan seguido ocurren estas colisiones y qué tanto daño causan a nuestro satélite".

El trabajo va progresando. Usando un telescopio computarizado, construido por Rob Suggs y Wesley Swift del Centro Marshall de Vuelos Espaciales, el grupo de Cooke está monitoreando el lado oscuro de la Luna "hasta diez noches por mes, cuando la fase lunar se encuentra entre 15 y 50%".

Durante una prueba del telescopio el pasado 7 de noviembre, Suggs y Swift grabaron una explosión, durante su primera noche de observaciones. Un trozo residual del cometa Encke golpeó la planicie del Mar de las Lluvias (Mare Imbrium), formando un cráter de casi 3 metros de ancho.

Con el comienzo de un monitoreo más seguido, el grupo de Cooke ya detectó un segundo impacto, el evento del 2 de mayo, después de solo 20 horas de observaciones. Esta vez, creen ellos, el proyectil fue un meteorito ocasional, un "esporádico", que no provenía de ningún cometa o asteroide en particular.

"Tuvimos un buen comienzo", dice Cooke, pero aún queda mucho trabajo por hacer. A él le gustaría observar durante todo el año, observando la Luna conforme esta pasa por corrientes conocidas de meteoritos. "Esto ayudaría a establecer una buena base estadística para nuestros planes [actividades en la Luna]".

¿Es seguro hacer una caminata lunar durante una lluvia de meteoritos? ¿Cuánta protección se necesita en los habitats lunares? ¿Tiene la Luna sus propias lluvias de meteoritos, desconocidas para la Tierra?

Espere las respuestas en un destello.

Fuente: NASA CIENCIA