10 marzo 2006

POLÉMICOS CUADRÚPEDOS HUMANOS

Encuentran en una región remota de Turquía cuadrúpedos humanos incapaces de poder desplazarse a dos piernas.

Todos miembros de una misma familia parecen sufrir un defecto genético.

Se ha llegado a especular con la posibilidad de que representen una especie de “eslabón perdido” evolutivo sembrando la polémica entre los expertos.

La evolución es una parte de la ciencia difícil de probar en sus detalles y algunas veces, como en el caso de la evolución humana, complicada de explorar por falta de un registro fósil completo.

Detalles sobre cómo se consiguió la postura erecta están todavía sujetos a debate.

También está todavía sujeta a debate la posibilidad de que algunos cambios evolutivos se hayan producido a saltos en lugar de gradualmente.

Hace poco publicábamos en EL CAFELITO el caso de los embriones de pollo con dientes de dinosaurio, que podría representar uno de esos cambios bruscos, en este caso letal para el portador.

Quizás los prehomínidos sufrieran una mutación de ese estilo en el pasado y pasarán a ser forzados a mantener una postura erecta que los cambios evolutivos graduales fueron luego corrigiendo.

Por esta razón el hallazgo de estos humanos que andan a “cuatro patas” ha provocado cierta excitación.

El fisiólogo turco Uner Tan, de la Universidad Cukurova de Adana sostiene que el caminar erguido o incluso la inteligencia son producto de una sola mutación.

Sin embargo, los expertos en antropología humana discuten la valía de este descubrimiento desde el punto de vista evolutivo, pues anatómicamente son exactamente como cualquier otro ser humano, y desde luego no son medio monos, ni prehomínidos, ni nada parecido.

Clínicamente la mutación que obliga a estas personas a caminar como los animales se ha definido como un caso especial de ataxia cerebral, el síndrome de Uner Tan, bautizado con el nombre de su descubridor.

Se manifiesta en el cuadrupedismo, un lenguaje bastante reducido, un grave retraso mental, una reducida conciencia de sí mismos y una postura habitual encorvada y con la cabeza inclinada, incluso cuando el afectado está sentado.

El último número del International Journal of Neuroscience describe minuciosamente este síndrome.

El médico Osman Demirhan descubrió este caso y llamó a Uner Tan, para que lo examinara con un equipo de fisiólogos, neurólogos y psicólogos.

Un análisis de sus cerebros realizado con resonancia magnética ha revelado, además, un estrechamiento de la región del cerebro llamada vermis y una reducción del cuerpo calloso.

Debido a un problema de consanguinidad una pareja tuvo 5 de sus 19 hijos con este problema.

Esta familia representa un caso único en el mundo.

Sin embargo, la comunidad científica se muestra escéptica frente a este hallazgo y hay una cierta acusación velada de sensacionalismo.

La cadena BBC emitirá el próximamente un documental sobre este hallazgo.

La mutación en este caso no devolvería a estas personas a estados evolutivos del pasado; sino que le afectaría de tal modo que, aunque fisiológicamente sean igual que cualquier otro humano, los mareos o el desequilibrio les obligarían a caminar sobre sus cuatro miembros.

Fuente: NEOFRONTERAS